Agua: 1/2 vaso de agua cada 5/6 meses
Pulverizar el musgo: una vez al mes.
Agua: 1/2 vaso de agua cada 5/6 meses
Pulverizar el musgo: una vez al mes.
Luz: Luz media, nunca al sol directo
Evitar la exposición al sol
Temperatura: 15º a 28º
Ventilación
Nuestro equipo de investigación ha realizado estudios con más de 30 tipos diferentes de Bonsái, seleccionando posteriormente los que mejor adaptación han desarrollado al medio, el equilibrio de todos los elementos que componen el ecosistema es fundamental en este caso, cada componente juega un papel vital para ayudar al bonsái a un perfecto desarrollo, partimos de un sustrato especial que contiene carbón activado para purificar el aire, núcleos de perlita para drenar el agua y turbas especiales para enriquecer y aportar alimento al bonsái.
Musgos y líquenes por su parte regulan la humedad dentro del ecosistema, el proceso de evaporación y condensación actúa de forma constante manteniendo la humedad y distribuyendo los elementos nutritivos y el oxígeno.
A lo largo del año, dependiendo de la temporada, adaptamos y desarrollamos en ecosistema los que mejor fortaleza experimentan… Ficus ginseng, Ficus retusa, Ligustrum…
Sí, los ecosistemas salen de nuestro Centro de producción adaptados, desarrollados y con el agua aportado, a partir de aquí tienes que observar y aportar agua cuando corresponda (5/6 meses) dependiendo de la temperatura ambiente, una buena señal es la desaparición de condensación todo el día.
La temperatura habitual de una casa u oficina ( 15º a 28 º ), conviene situarlo en un lugar con luz y claridad, siempre protegido del sol directo, evitar corrientes, sin darte cuenta pueden hacer subir o bajar la temperatura de manera brusca.
El ecosistema siempre permanece con un colorido fresco y verde, cuando la humedad empieza a escasear podremos apreciar que la condensación de agua que se forma en las paredes a primeras horas de la mañana es muy escasa, o la tierra está poco húmeda, es el momento de aportar agua, esto sucede cada 5/6 meses aprox.
En los meses de verano tendrás que tener cuidado, el consumo de agua del bonsái es mayor que en cualquier otro periodo del año, si te vas de vacaciones deberás observar la humedad interior y en su caso aportarle medio vaso de agua.
No te olvides de refrescar el musgo de tu ecosistema, siempre tiene que estar fresco, pulverízalo a menudo, y verás en poco tiempo el espectáculo que te ofrece.
Aportar ½ vaso de agua directamente sobre la tierra o el musgo, agua normal (del grifo), evitar agua con excesiva cal, podría terminar dañando el cristal, en este caso se puede usar agua mineral, no debe aportar más cantidad de la indicada, este proceso se repetirá cada 5/6 meses.
El crecimiento es muy lento y se adapta al espacio, conservando con ello el equilibrio, el espacio reducido en el que se encuentra favorecerá su forma.
La evaporación y condensación de agua es lo que conocemos como “efecto lluvia”.
Es normal en la naturaleza, las diferencias de temperatura reproducen fielmente dentro del ecosistema, el proceso de evaporación y condensación creando con ello este efecto.
Si la condensación es general y continúa todo el día, sería necesario abrir completamente la válvula de ventilación al menos 24/48 horas para regular el ambiente, (En los modelos que disponen de este sistema.)
El exceso de condensación puede indicarnos que el recipiente está situado en corriente o tiene exceso de agua.
La vida media está entre 4/6 años, tenemos casos con ecosistemas en condiciones óptimas con más de 8 años. En este tiempo podrás apreciar cómo se desarrolla tu BONSAI adaptando sus raíces, tallos y hojas tanto al ambiente interior como al espacio.
Si, esta es una labor muy importante, El paso del tiempo, o la luz desmesurada pueden provocar en el ecosistema un crecimiento de tallos que puede resultar excesivo, esto se puede corregir cortándolos con cuidado y dando forma al conjunto. Una vez realizado los cortes, dejar abierto 24/48 horas
Es un proceso normal, tu Ecosistema se está adaptando a su nueva ubicación y en este proceso puede ocurrir que renueve las hojas, debemos apreciar que en su lugar hay nuevos brotes, ésta es la mejor señal de salud y perfecta adaptación.
Es muy aconsejable retirar cuanto antes las hojas marchitas para evitar agentes patógenos.
Si esto ocurre, y el árbol no repone nuevos brotes, significa que han aparecido hongos por exceso de humedad, te recomendamos que quites la capsula al menos tres días para provocar que descienda la humedad y se oxigene, una vez pasados los tres días debes volver a poner la cápsula y dejar abierta la ranura de ventilación siete días para favorecer la oxigenación.
Ponemos un gran cuidado en la limpieza y pureza de los elementos que introducimos en el ecosistema, a pesar de ello en alguna ocasión pueden quedar larvas o huevos de algún insecto que eclosionan debido las óptimas condiciones del interior.
Para solucionar este problema se debe abrir la cápsula de vidrio unas horas y favorecer su liberación o bien aplicar muy levemente un insecticida en espray (sin CFC). Observa que el producto a aplicar cumple la normativa medioambiental.
Es muy aconsejable quitar los restos de hojas o ramas marchitas para evitar agentes patógenos que dañen al ecosistema y para conservar el sentido estético del conjunto.
Se puede quitar la cápsula del ecosistema, extraer los restos de hojas o ramas caídas y volver a cerrar. Esto no ocasionará ningún problema al conjunto.
El paso del tiempo hace que las plantas en su ciclo vital generen pequeñas impurezas o manchas en las paredes del recipiente, de una forma muy sencilla se pueden limpiar, quitamos la capsula de vidrio y con un trapo húmedo frotando suavemente se procede a limpiar las manchas orgánicas
Tu ecosistema es autónomo, no depende de ti, asegúrate únicamente situarlo en una ubicación correcta:
Luz: No debes dejar la persiana bajada, un nivel medio de luz será suficiente, es importante que no le dé el sol directamente.
Temperatura: 15º a 25º no lo pongas muy cerca de la ventana puede hacer excesivo calor en verano o frío en invierno.
Si prevés que la temperatura pueda subir hasta los 30º te recomendamos que dejes tu Ecosistema metido en un recipiente con agua.
Cubrir siempre por debajo de la base cerámica que contiene el conjunto, cuatro/cinco dedos será suficiente.
Agua: Asegúrate que tu biogarden tiene el suficiente suministro de agua, si vas a faltar mucho tiempo (en verano), es mejor que le aportes ½ vaso de agua sobre el musgo.
En la época estival tanto el consumo como la evaporación es mucho mayor que en el resto del año, por ello no debe faltarle.
Es normal que las diferencias de temperatura se manifiesten como condensación en la cápsula de vidrio, esto suele suceder a primeras horas de la mañana o bien a últimas horas de la tarde coincidiendo con bajadas o subidas de temperatura, si esta condensación permanece todo el día en la capsula, puede estar ocurriendo lo siguiente:
El Biogarden está situado muy cerca de una ventana por lo que le afecta permanentemente las diferencias de temperatura, sería conveniente buscar una nueva ubicación más alejada de la ventana.
El Biogarden está situado en corriente, esto es muy frecuente y provoca el enfriamiento de la cápsula con el consiguiente efecto condensación, en este caso es conveniente buscar una ubicación nueva alejado de la corriente.
La aportación de agua fue excesiva, si este puede ser el origen, podemos corregirlo abriendo el sistema de ventilación 2/3 días, después comprobaremos que la humedad se ha regulado correctamente.
Estamos comprometidos con el medio ambiente, en ocasiones, diferentes planteamientos de seguridad o equilibrio térmico en el transporte, hacen que no sea posible conseguir el 100% de elementos biodegradables, principalmente en el packaging, si esto no es posible, al menos tratamos de conseguir que sean de carácter reciclado o reciclable.
Trabajamos para incorporar todos los nuevos elementos y materiales que hagan posible disminuir o anular el impacto ecológico.